Básicamente, todo dios (o mejor dicho, todo ente) se quiere cargar a Tsukune. Por venganzas personales, Tsukune acaba recibiendo por todos lados aunque, como buen protagonista, siempre gana. Y entre medio, discusiones con Moka que todos sabemos cómo van a acabar. En según qué puntos, esta serie no deja mucho espacio a la sorpresa: discusión con Moka, pelea que pinta mal, acaban ganando y reconciliación. Menos mal que para darle cierto empaque a la serie, tenemos los problemas de Tsukune con su cuerpo que se está convirtiendo en un ghoul (aunque ahora parece que domina sus poderes).
Además, la aparición de esa especie de grupo antisistema (antítesis) parece que va a dar un poco más de juego. Buen tomo, aunque vuelva a ser un pelín repetitivo.
1 despropósitos :
No sé yo si leeré esta serie....
¡Un abrazo!
Publicar un comentario